El Torito fue fundado por Larry J. Cano, que atribuye al restaurante el mérito de haber popularizado la margarita en Estados Unidos. Cano sirvió varias veces en Europa y en Corea, se licenció en empresariales y trabajó como barman. Cuando el dueño del bar murió, la viuda le preguntó a Cano si lo quería.
El propio bar le pareció a Cano popular entre los veteranos, pero tuvo una vida limitada. Llevó su propia cocina mexicana al bar y se convirtió en el primer El Torito, cuyo nombre -teóricamente- se basaba en el gran cuenco de barro con un toro pintado. Cano contrató a cocineros mexicanos locales, como Ignacio Segura, que acabó convirtiéndose en el vicepresidente de operaciones durante los años 80, y les pidió que cocinaran auténtica comida mexicana, inspirada en las vacaciones que la familia Segura pasaba en Houston. La receta original del queso fundido era la de Rosa-María Segura. La carrera de Ignacio en la dirección fue seguida por su mejor amigo, que ahora es dueño de un restaurante mexicano en Rancho Santa Margarita, Ca. Ignacio, o más cariñosamente conocido como «Nacho», está retirado en Orange County, Ca. También administró restaurantes en Acapulco y anteriormente fue gerente del Ritz Carlton en Acapulco antes de su empleo en El Torito. Durante un tiempo, Cano, con problemas económicos, fue desalojado de su casa y vivió en el restaurante.
En tres años el restaurante tuvo éxito, y Cano abrió más locales. En 1976 tenía 20 locales y vendió el negocio a W. R. Grace and Company por unos 20 millones de dólares. Contrataron a Cano como presidente con una directiva de rápida expansión.
Grace vendió sus restaurantes en una compra apalancada en 1986. La empresa resultante, Restaurant Enterprises Group (REG), se declaró en quiebra en 1993. REG fue adquirida fuera de la quiebra en 1994 por Foodmaker, que se rebautizó como Family Restaurants, luego Koo Koo Roo Enterprises, y después Prandium. En 2000, Acapulco compró El Torito a Prandium. Acapulco cambió el nombre de su empresa matriz a Real Mex Restaurants en 2004 y trasladó la sede a Cypress, California.
El 3 de octubre de 2011, Real Mex Restaurants se acogió al Capítulo 11 de bancarrota y anunció que se ponía en venta, citando la mala economía como motivo. No se anunciaron planes de cierre de restaurantes ni de despido de personal. Fue adquirida por un grupo de sus tenedores de billetes en una subasta de bancarrota en 2012.