La prescripción de inhibidores de la colinesterasa para la enfermedad de Alzheimer: El momento oportuno es importante

Al editor: Como subespecialistas en psiquiatría geriátrica y farmacia, agradecemos esta revisión concisa e informativa de las terapias farmacológicas y no farmacológicas para la enfermedad de Alzheimer. Sin embargo, nos gustaría hacer una sugerencia con respecto a la información de la Tabla 1 sobre la administración de inhibidores de la colinesterasa. Los autores recomiendan administrar donepezilo (Aricept) a la hora de acostarse y otros inhibidores orales de la colinesterasa, concretamente galantamina (Razadyne) y rivastigmina (Exelon), una o dos veces al día dependiendo de si la formulación es de liberación prolongada.

Los efectos adversos más comunes de los inhibidores de la colinesterasa incluyen náuseas, diarrea, vómitos, disminución del apetito, dispepsia, anorexia, calambres musculares, fatiga, insomnio, mareos, dolor de cabeza y astenia.1-3 Tomar estos medicamentos con alimentos, preferiblemente una comida completa, puede mitigar estos efectos gastrointestinales. Por lo tanto, se recomienda tomar los inhibidores de la colinesterasa con alimentos siempre que sea posible para mejorar la tolerabilidad. Además, la administración de estos medicamentos con una comida retrasa la absorción del fármaco, lo que reduce las concentraciones plasmáticas y cerebrales máximas, disminuyendo así el riesgo de todos los efectos adversos agudos.4 Afortunadamente, los prospectos de la galantamina y la rivastigmina recomiendan la dosificación con las comidas.2,3 Sin embargo, el prospecto del donepezilo sólo menciona la dosificación nocturna.1 Cuando el donepezilo se administra por la noche, los niveles plasmáticos del fármaco alcanzan su máximo en tres o cuatro horas,5 contribuyendo probablemente a la incidencia de insomnio y sueños anormales.

La única justificación que conocemos para la dosificación nocturna es que los niveles sanguíneos máximos y los efectos adversos que los acompañan se producirían mientras los pacientes están dormidos y, por tanto, pasarían desapercibidos. Sin embargo, las náuseas pueden despertar a uno del sueño, y otro efecto adverso común, la bradicardia, podría predisponer a los pacientes a sufrir caídas nocturnas al pasar de la cama al baño.

Recomendamos administrar donepezilo por la mañana con una comida, y las formas orales de galantamina y rivastigmina una o dos veces al día, dependiendo de la formulación, con las comidas.