Autor médico: Alan Rockoff, MD
Medical Editor: Leslie J. Schoenfield, MD, PhD
La palabra «avance» se utiliza en exceso. Si todos los artículos de moda que los reporteros anuncian a bombo y platillo en las noticias de salud de la noche fuesen reales, ya habríamos «abierto camino» hace mucho tiempo. En lugar de ello, la palabra se aplica a menudo a avances pronto olvidados que no lo son y a curas que no lo son.
De vez en cuando, sin embargo, aparece algo nuevo que representa un verdadero avance. En 2001, la FDA aprobó el tacrolimus (nombre comercial: Protopic) para el tratamiento del eczema, también conocido como dermatitis atópica. Protopic es el primer tratamiento eficaz sin esteroides para esta afección común, crónica y con picor.Un fármaco relacionado, el pimecrolimus (nombre comercial: Elidel), está ahora en el mercado.
Estos nuevos fármacos se denominan «inmunomoduladores». Se utilizaron por primera vez de forma interna para ayudar a los pacientes con trasplantes de riñón e hígado a evitar el rechazo de los órganos recibidos. Funcionan suprimiendo el sistema inmunitario. Sin embargo, cuando estos fármacos se utilizan externamente para tratar la piel, no debilitan ni modifican el sistema inmunitario del organismo.Además, a diferencia de los esteroides tópicos (cremas de cortisona), estos nuevos medicamentos no provocan el adelgazamiento de la piel ni la rotura de los vasos sanguíneos superficiales (atrofia).
El principal efecto secundario de estos nuevos medicamentos tópicos es una sensación de quemadura en la piel. Algunos pacientes se quejan de que la piel les pica o les arde durante un tiempo después de aplicarse la crema. Esta sensación tiende a disminuir a medida que la piel se cura. En este momento, ni Protopic ni Elidil están aprobados para su uso en niños menores de 2 años. Sin embargo, cuando se completen más estudios, es muy probable que los médicos puedan tratar también a bebés y niños muy pequeños.
La buena noticia es que estos moduladores inmunitarios funcionan. Muchos pacientes que responden mal o no responden en absoluto a los esteroides tópicos se recuperan muy bien cuando utilizan esta nueva clase de medicamentos. Esto no significa que las cremas de esteroides no se utilicen más. Si se prescriben correctamente, estas viejas cremas son seguras y eficaces en muchas situaciones, incluso en niños, o en zonas sensibles como la cara o la ingle.
También es importante recordar que ningún medicamento, incluidos los nuevos, cura el eczema por completo. Esta afección representa una sensibilidad heredada que tiende a repetirse a lo largo de la vida. Aun así, muchos pacientes con dermatitis atópica podrán ahora conseguir una piel cómoda y de mejor aspecto mediante el uso de tacrolimus, pimecrolimus y los medicamentos relacionados que seguramente seguirán.