El 12 de septiembre de 1866, se produjo un feliz accidente que cambió Broadway para siempre.
Un empresario teatral neoyorquino había reservado dos propiedades: una compañía de ballet francesa llena de hermosas chicas que llevaban el escandaloso nuevo invento, las medias de seda, y un melodrama demasiado maduro sobre un hombre que se está replanteando vender su alma al diablo. El problema era que el teatro en el que había contratado a las bailarinas había sido dañado en un incendio, y él tenía que pagar por toda la compañía de baile sin tener un lugar en el que pudieran actuar y ganar algo de dinero.
Así que, con la clásica inventiva empresarial americana, decidió combinar los dos espectáculos. El resultado, The Black Crook, una extravagancia que incluía una escena de batalla en el mismísimo infierno, ha sido ampliamente identificado por los historiadores del teatro como el primer musical «de libro» de Broadway. Fue muy popular, con 484 representaciones en una época en la que se consideraban respetables 20 representaciones. Estuvo de gira durante décadas y se reestrenó en Broadway en varias ocasiones.
El título hace referencia al personaje de Herzog, el intermediario del diablo que le ha prometido un alma nueva cada año a cambio de la vida eterna. Se le describe como «un alquimista y hechicero.»
Para conmemorar el 150 aniversario del espectáculo (y del musical de Broadway), el Abrons Arts Center de Off-Broadway está planeando una reposición de The Black Crook, que se representará entre el 17 de septiembre y el 7 de octubre, en lo que se describe como una puesta en escena minimalista que llevará «el mayor de los espectáculos americanos al más pequeño de los espacios.»
El autodenominado «Drama original, grandioso, romántico, mágico y espectacular» tiene música de Thomas Baker, libro de Charles M. Barras y letra de Theodore Kennick.
La reposición estará dirigida por Joshua William Gelb, y el reparto contará con Randy Blair, Alaina Ferris, Lizzie Hagstedt, Steven Rattazzi, Jessie Shelton, Christopher Tocco, Kate Weber y Merlin Whitehawk. Los arreglos y las composiciones adicionales son de Alaina Ferris y Justin Levine, con coreografía de Katie Rose McLaughlin, decorados de Carolyn Mraz, diseño de vestuario de Normandy Sherwood, diseño de iluminación de Bradley King, diseño de sonido de Matt Stine y dramaturgia y texto adicional de Dan O’Neill.
Gelb dijo a Playbill.com: «He estado trabajando en The Black Crook durante casi 10 años, y sólo recientemente me di cuenta de que se acercaba el 150 aniversario. Como amante del teatro musical (también hago de libretista) y de la historia del teatro, la mitología de The Black Crook siempre ha estado en mi radar. Independientemente de que merezca o no el título de «primer» musical (y no creo que esa definición sea posible), la historia de The Black Crook es, sin duda, una historia de origen adecuada para el nacimiento de una forma de arte verdaderamente estadounidense. Y al presentar tanto el musical original como la historia de su creación, es de esperar que surja una tercera narrativa, que dramatice la zona de cruce cargada de teatro en el diagrama de Venn entre el arte y el artista»
Explicó: «Esta producción trata de cuestionar la idea de espectáculo. Así, mientras que el espectáculo original tenía un reparto de 100 personas, nosotros sólo tenemos ocho. La orquesta completa del original también se sustituye por esos mismos ocho intérpretes y lo mismo puede decirse del cuerpo de baile. Así que supongo que nos interesa la economía del espectáculo. ¿Cuánto podemos conseguir con los limitados recursos de que disponemos? La gran escena de transformación de 13 minutos de duración que coronaba la producción original de cinco horas y media era un hito en la tecnología teatral, que ponía patas arriba las nociones anteriores de lo que era posible escenificar en el escenario. Nuestra transformación es un poco más simbólica, más introspectiva. Pero es una transformación, no obstante, y espectacular por derecho propio»
Aquí está el desglose del reparto:
Rodolphe / Charles Barras: Steven Rattazzi
Hertzog / William Wheatley: Merlin Whitehawk
Amina / Stalacta / Sallie St. Clair: Alaina Ferris
Greppo / Joseph Whitton: Christopher Tocco
Conde Wolfenstein / Zamiel / Henry Jarrett: Lizzie Hagstedt
Von Puffengruntz / Giuseppe Operti: Randy Blair
Madam Barbara / William Voegtlin: Kate Weber
Carline / Dragofin / Clara Morris: Jessie Shelton
Los historiadores pueden haber escogido El bandido negro como «primera» por conveniencia. En realidad hubo muchas obras de teatro con música en Nueva York antes de 1866, más o menos siguiendo las convenciones de la ópera con música popular de estilo americano interpolada. Pero The Black Crook fue sin duda la más exitosa y la más imitada. Aunque está ambientada en Alemania, tiene un peculiar carácter americano. Y cuando uno piensa en la clásica «corista» o en el «gran número de baile» o en la «impresionante escenografía», está pensando básicamente en las expectativas creadas hace tiempo por The Black Crook.
El Abrons Arts Center está situado en el 466 de la calle Grand de Manhattan, a un kilómetro y medio de la esquina de Broadway con la calle Prince, sede del desaparecido Niblo’s Garden, con capacidad para 3.000 espectadores, donde se estrenó The Black Crook. Las entradas, a 25 dólares, pueden pedirse en AbronsArtsCenter.org.