(footpainexplaned.com)
Muchos pacientes intentan simplemente vivir con este dolor o asumen que tienen verrugas plantares e intentan tratarlas en casa, sin éxito. Finalmente, los pacientes se dan por vencidos y acuden a la consulta después de meses de tratamientos caseros sólo para descubrir que su dolor tiene fácil remedio.
Las opciones de tratamiento consisten en amortiguar la zona del dolor con plantillas y controlar la cantidad de sudoración de los pies utilizando polvos secantes. Sin embargo, estas opciones de tratamiento suelen utilizarse mejor como medicina preventiva una vez que su podólogo haya tratado la zona. Es probable que su podólogo realice un curetaje de la lesión que no debería causarle dolor. Otras opciones que su médico puede ofrecerle para el tratamiento son las inyecciones en la zona o el uso de ácidos diluidos para deshacerse por completo de la glándula sudorípara obstruida.
Sea cual sea la opción de tratamiento que elija con el consejo de su médico, es importante recordar que es probable que esta afección reaparezca y requiera un control periódico. Los pacientes más susceptibles tienen pies que sudan más. La sudoración puede verse exacerbada por el clima frío, los zapatos cerrados y los hongos en los pies. Será importante utilizar polvos secantes o sprays junto con antifúngicos para ayudar a disminuir la incidencia de esta afección.
Para obtener más información sobre las afecciones que pueden hacer que le duelan los pies, haga clic en nuestra página interactiva «Dónde duele»: https://peninsulapod.com/where-does-it-hurt/