Todo es cuestión de genes.
La Drosophila fue el primer insecto al que se le secuenció su genoma completo. Es decir, en el año 2000 conocíamos la secuencia completa del ADN de la mosca de la fruta. Hasta 2003 no se secuenció por completo el genoma humano.
Muchos de nuestros propios genes son similares a los que se encuentran en las moscas de la fruta, y el hecho de que sepamos tanto sobre ellas y sus genes hace que la drosophila sea un animal, o modelo, muy útil para estudiar cómo los genes afectan a la función del corazón. Paul y su equipo pueden activar o desactivar genes, o incluso sustituir ciertos genes por otros nuevos. Luego, observan y esperan. ¿Qué efecto tendrá esto en el corazón de la mosca?
Una enfermedad del músculo cardíaco llamada cardiomiopatía.
Paul y su laboratorio han estado utilizando la drosophila para observar cómo un tipo específico de células trabaja para mantener el corazón sano. Estas células, llamadas nefrocitos, se encuentran dentro del corazón de la mosca y eliminan los productos de desecho de su sangre.
El equipo eliminó el gen responsable de la producción de nefrocitos de los embriones de drosophila. Cuando los embriones se convirtieron en moscas de la fruta adultas, el equipo descubrió que las moscas sufrían una enfermedad del músculo cardíaco conocida como cardiomiopatía.
Una acumulación de desechos.
Debido a que sabía que los nefrocitos filtran la sangre y eliminan los desechos Paul pudo entonces observar la sangre de las moscas y ver exactamente qué sustancias se habían acumulado sin ellas. La respuesta era una proteína llamada SPARC. Efectivamente, cuando Paul redujo la cantidad de expresión del gen SPARC la cardiomiopatía desapareció.
Ahora, Paul y su equipo van a utilizar sus moscas para averiguar exactamente cómo la proteína SPARC causa esta enfermedad del músculo cardíaco. Dado que muchos de nuestros genes evolucionaron hace millones de años en los corazones y sistemas circulatorios de organismos sencillos como las moscas de la fruta, esperan que este trabajo les ayude a comprender cómo se desarrollan las enfermedades del músculo cardíaco, no sólo en las moscas, sino también en los seres humanos.
Descubra más de nuestra investigación sobre la cardiomiopatía en el sitio web de la BHF.