La dependencia del Xanax y el síndrome de abstinencia pueden resultar abrumadores, pero nunca pierdas la esperanza. Siempre hay una salida. Al reducir lentamente la dosis de Xanax consumida, el cuerpo puede adaptarse a tener dosis más bajas de la droga con el tiempo. Este periodo, llamado desintoxicación, puede durar varias semanas dependiendo de la gravedad de tu adicción. Durante la desintoxicación, las personas pueden experimentar desagradables síntomas de abstinencia. Pero con el apoyo del personal médico de su lado, la desintoxicación con supervisión médica puede ayudarle a sobrellevar la abstinencia y lograr una sobriedad duradera. La mejor manera de obtener el nivel de atención que necesita es en un centro residencial de tratamiento de la adicción al Xanax.
El tratamiento residencial ofrece una variedad de opciones de atención, incluyendo el tratamiento para la dependencia de múltiples sustancias o para los trastornos psiquiátricos concurrentes. Cuando entres en el tratamiento residencial tendrás acceso a la atención médica y de salud mental para que pases la desintoxicación de forma segura. Médicos y enfermeras psiquiátricas le supervisarán constantemente y le ayudarán a progresar un paso, y un día, a la vez.
Después de la desintoxicación, comenzará a construir su nueva vida sobria. Recibirás un tratamiento que aborda las causas emocionales de tu adicción y aprenderás nuevas habilidades de afrontamiento y de vida que te ayudarán a mantenerte sobrio. Esto puede incluir una variedad de tratamientos, tales como el grupo y el asesoramiento individual, el arte o la terapia musical, y las prácticas de atención plena como el yoga y la meditación.
Otro beneficio del tratamiento residencial es el acceso a una comunidad única. Puedes conectar con otras personas que se enfrentan a retos similares a los tuyos, por lo que ya no tienes que afrontarlos solo. Es posible que los amigos y la familia de su vida diaria no puedan comprender plenamente sus problemas; el tratamiento residencial ha permitido establecer muchas amistades duraderas basadas en el apoyo mutuo y la empatía.
La recuperación de Xanax lleva tiempo, dedicación y paciencia. Pero muchas personas se han curado de esta adicción y han recuperado sus vidas; ahora, es tu turno. Da los primeros pasos para acabar con tu dependencia del Xanax llamando a un centro de tratamiento residencial cerca de ti. Si no puedes hacerlo solo, no temas pedirle a un amigo o a un ser querido de confianza que te ayude a hacer esa llamada. Ambos se sentirán aliviados de haberlo hecho.