El océano nunca está quieto. Ya sea observando desde la playa o desde un barco, esperamos ver olas en el horizonte. Las olas son creadas por la energía que pasa a través del agua, haciendo que se mueva en un movimiento circular. Sin embargo, el agua no se desplaza realmente en forma de olas. Las olas transmiten energía, no agua, a través del océano y, si no son obstruidas por nada, tienen el potencial de viajar a través de toda una cuenca oceánica.
Las olas son más comúnmente causadas por el viento. Las olas impulsadas por el viento, u olas superficiales, se crean por la fricción entre el viento y el agua superficial. Cuando el viento sopla sobre la superficie del océano o de un lago, la perturbación continua crea una cresta de ola. Este tipo de olas se encuentran en todo el mundo en el océano abierto y a lo largo de la costa.
Olas potencialmente más peligrosas pueden ser causadas por un clima severo, como un huracán. Los fuertes vientos y la presión de este tipo de tormentas severas provocan mareas de tempestad, una serie de largas olas que se crean lejos de la costa en aguas más profundas y se intensifican a medida que se acercan a tierra. Otras olas peligrosas pueden ser causadas por perturbaciones submarinas que desplazan grandes cantidades de agua rápidamente, como terremotos, deslizamientos de tierra o erupciones volcánicas. Estas olas muy largas se llaman tsunamis. Las mareas de tempestad y los tsunamis no son el tipo de olas que uno se imagina cayendo sobre la costa. Estas olas ruedan sobre la costa como una subida masiva del nivel del mar y pueden alcanzar grandes distancias tierra adentro.
La atracción gravitatoria del sol y la luna sobre la tierra también provoca olas. Estas olas son mareas o, en otras palabras, maremotos. Es un error común pensar que un maremoto es también un tsunami. La causa de los tsunamis no está relacionada en absoluto con la información de las mareas, sino que puede producirse en cualquier estado de marea.
Transcripción de vídeo
Las olas transmiten energía, no agua, y son causadas comúnmente por el viento cuando sopla a través del océano, los lagos y los ríos. Las olas causadas por la atracción gravitacional de la luna y el sol se llaman mareas. El flujo y reflujo de las olas y las mareas son la fuerza vital de nuestro océano mundial.