Significado de la piedra de nacimiento granate &Historia
El nombre «granate» tiene su origen en el latín medieval granatus, que significa «granada», en referencia a la similitud del color rojo. Los granates se han utilizado desde la Edad de Bronce como piedras preciosas y abrasivos. Los faraones del antiguo Egipto llevaban collares con granates rojos. Los anillos de sello de la antigua Roma llevaban intaglios de granate que se utilizaban para estampar la cera que aseguraba los documentos importantes. El clero y la nobleza de la Edad Media tenían preferencia por los granates rojos.
El granate es en realidad un grupo de varios minerales. Cinco de ellos -el piropo, la almandina, la espesartina, la grossular y la andradita- son importantes como gemas. El piropo y la almandina van del púrpura al rojo. La espesartina se encuentra en emocionantes naranjas y amarillos, mientras que la andradita es mayoritariamente de color amarillo a verde (la variedad gema demantoide). El granate Grossular es el que tiene la gama más amplia, desde el incoloro hasta el amarillo, pasando por el naranja rojizo y el rojo anaranjado, así como un verde fuerte y vibrante llamado tsavorita.
La peineta antigua de piropo del Smithsonian es una de las piezas más famosas de la joyería de granates (piropo viene del griego pyrōpos, que significa «ojo feroz»). En la cresta de la peineta hay un gran granate tallado en forma de rosa, como una reina que observa serenamente a su corte. Los granates piropo que decoran esta joya en forma de tiara proceden de las históricas minas de Bohemia (ahora parte de la República Checa), y estas ricas bellezas rojas fueron muy populares durante la época victoriana (1837-1901), cuando se creó esta pieza.
¿Quieres saber cuáles son los supuestos beneficios para la salud de tu piedra de nacimiento granate? Según la astrología india, el granate ayuda a eliminar los sentimientos negativos (depresión, culpa) y a infundir mayor confianza en sí mismo y claridad mental para promover el pensamiento creativo y la paz mental. En la época antigua y medieval, se pensaba que gemas como el granate eran remedios para las enfermedades inflamatorias y para calmar el corazón enfadado.