El nerviosismo es una reacción normal ante determinadas situaciones. Con estos consejos y un poco de práctica, puedes aprender a evitar que los nervios te superen.
No tengas miedo al nerviosismo
En una situación incómoda, recuérdate a ti mismo que el nerviosismo es normal, e incluso puede ser útil.
La mayoría de nosotros nos sentimos así cuando se nos presentan nuevos retos y oportunidades. En última instancia, estas experiencias nos ayudan a crecer.
El nerviosismo es la forma que tiene tu cuerpo de prepararte para lo que viene, que suele ser algo que está fuera de tu zona de confort. Dejar de lado el miedo y aceptar que es una experiencia completamente natural puede ayudar a mantener los nervios bajo control.
Esté preparado
No siempre se puede predecir o planificar todo lo que la vida nos depara. Sin embargo, hay algunas situaciones laborales y sociales para las que puedes prepararte de antemano. Éstas incluyen:
- practicar para una presentación o reunión de trabajo programada
- hacer que un amigo o un ser querido te acompañe a un evento o cita
- permitirse un tiempo extra para prepararse para el trabajo, las citas u otros eventos sociales
Ponerse en un espacio mental positivo
La falta de confianza o la preocupación por meter la pata son a menudo culpables del nerviosismo. Cuando empieces a dudar de tus capacidades, busca formas de ponerte en un estado de ánimo más positivo.
Para ello, utiliza la autoconversación positiva o visualiza el resultado deseado. Poner una canción o una película que te levante el ánimo también puede hacer maravillas.
Habla con alguien
Llama a tu madre, a tu mejor amigo o a cualquier otra persona en la que confíes. Compartir tus sentimientos con alguien con quien te sientas cómodo ayuda a poner las cosas en perspectiva. Pueden ayudarte a ver la situación desde un punto de vista más racional.
Un estudio de 2014 demostró que compartir tus sentimientos con otra persona, especialmente con alguien que ha pasado por una situación similar, puede reducir el estrés y hacerte sentir más positivo.
Prueba una técnica de relajación
Aprender a relajarse es importante para superar el nerviosismo y manejar el estrés en general. Los ejercicios de respiración son sólo una forma de practicar la relajación.
La respiración profunda funciona rápidamente, y puede practicarse en cualquier momento y lugar en el que te sientas nervioso. Existen diferentes tipos de ejercicios de respiración que han demostrado funcionar. Entre ellos, la técnica de respiración 4-7-8 y la respiración diafragmática.
formas de afrontar el estrés
- ejercicio
- yoga
- meditación
- masaje
- escuchar música
- pasar tiempo con una mascota
- aromaterapia