Hay muchas razones para querer tener unos abdominales fuertes. Son muy difíciles de trabajar, por lo que pueden suponer un reto para la forma física. O tal vez sólo quieres la foto perfecta junto a la piscina para Instagram. Pero sean cuales sean tus motivaciones, hay algunas cosas sobre tener un six-pack que sólo puedes saber cuando estás en el otro extremo del proceso. En un hilo de conversación en Reddit, chicos con abdominales visibles y cincelados están compartiendo las cosas que aprendieron que les sorprendieron después de lograr sus objetivos de estómago duro como una roca.
Un chico dijo que conseguir abdominales no hizo tanto por su imagen corporal en general como pensaba. «Mejorar mis hombros, mi pecho y mis brazos hizo mucho más. Me dio mucha confianza», dijo. «No tienes muchas oportunidades de quitarte la camiseta sin parecer un imbécil».
De hecho, la falta de escenarios cotidianos en los que es aceptable ir sin camiseta supuso una decepción para los nuevos propietarios de abdominales, y afectó a su motivación. «Esta es la razón por la que me salto el día de las piernas a veces cuando estoy ocupado en la semana», dijo un comentarista. «Llevo pantalones todo el día en el trabajo, no tengo muchas oportunidades de mostrar mis piernas de todos modos. Incluso cuando llevo pantalones cortos, no veo la diferencia».
Muchos chicos dijeron que adoptan la misma actitud sobre los abdominales: si casi nadie los va a ver, ¿para qué? «No olvides que los abdominales son la parte más difícil de conseguir, puedes tener una barriga dura pero los abdominales tienes que entrenarlos específicamente», dijo un chico. «Conocí a muchos tíos musculosos que tenían una barriga limpia, y estaban bastante en forma, simplemente no se ejercitaban para ello, la mayoría de los tíos no se ejercitan para los abdominales, y para ser sincero no sé por qué la gente está tan obsesionada con ellos».
Sin embargo, en las raras ocasiones en las que se quitaban la camiseta, los chicos con six-packs recordaban que sus parejas ponían cara de «mañana de Navidad» al ver sus esculpidos estómagos. «Cuando tengo una novia vale la pena», dijo un comentarista. «A ella le gustaba mucho tocarme la barriga. Ahora que hemos roto, es como una cuenta de ahorros».
Otro chico, sin embargo, descubrió que tener abdominales en realidad afectaba negativamente a su vida amorosa. «Me subió el ego a las nubes, lo que elevó mis estándares de selección para las chicas, y ahora me acuesto mucho menos», admitió. «En resumen, no merece la pena, amigo».
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En otra parte del hilo, un hombre hizo la afirmación bastante atrevida de que tener abdominales (y específicamente, entrenar sus abdominales) lo hacía mejor en la cama.
«Trabajo mis abdominales a diario y corro a diario sin importar los demás entrenamientos que hago, por lo que mi resistencia es extremadamente buena», dijo. «A la hora de tener sexo, ese es un aspecto que le encanta a mi mujer. Cuando ella dice que no pares, no hay la menor necesidad de ajustarse, bajar el ritmo o hacer una pausa, sea cual sea la posición. Así que la fuerza y la resistencia del núcleo juegan un papel muy importante, y generalmente cuanto más trabajas, más vascularizados y bombeados están tus músculos y abdominales, y es entonces cuando ella mira hacia abajo y pasa sus manos por mis abdominales y gime más y comenta sobre las imágenes… y esa, amigos míos, es la única razón por la que machaco mis abdominales y corro todos los días. Ese momento, esa sensación que tengo al hacerla sentir así… me encanta».
¿Te sientes motivado? Aquí tienes seis maneras de conseguir unos abdominales de infarto. Y recuerda: los abdominales pueden terminarse en el gimnasio, pero los cimientos se construyen en la cocina.