Ingredient IQ: Raíz de jengibre

La raíz de jengibre fresca da un toque distintivo a una variedad de cocinas desde Asia hasta Sudamérica. Esta raíz morena y nudosa es fácil de encontrar en la mayoría de las tiendas de comestibles, normalmente junto con el ajo y las chalotas. Sin embargo, muchos cocineros no saben cómo prepararla y utilizarla. El siguiente repaso le indica todo lo que necesita saber para utilizar el jengibre fresco, incluyendo las formas de añadirlo a sus recetas favoritas.

Cómo seleccionar la raíz de jengibre fresco
Elija «manos» de raíz de jengibre fresco con una piel firme y sin arrugas que sea lo suficientemente fina como para rasparla con la uña. (Una piel dura y gruesa es señal de que el jengibre puede ser viejo y estar seco). La raíz de jengibre fresco suele venderse por libras, por lo que no hay problema en romper sólo lo que se quiera de un trozo más grande.

Cómo pelarlo
Pele el trozo o pomo de jengibre raspando la piel con una cucharilla de borde fino. No es absolutamente necesario pelar el jengibre fresco -el jengibre sin pelar funciona bien en la mayoría de las recetas- aunque siempre es mejor pelarlo si no se utiliza jengibre orgánico.

Cómo cortarlo
Antes de empezar a cortar la raíz de jengibre, primero rompa la cantidad de jengibre fresco que necesita para una receta. Esto no afectará al resto de la frescura de la raíz, y el trozo más pequeño es más fácil de trabajar que una mano entera.

Corta la raíz de jengibre en monedas para dar sabor a sopas, guisos y otros platos cocinados a fuego lento. El jengibre cortado en rodajas permite controlar mejor el sabor final de un plato, ya que las monedas pueden retirarse en cualquier momento si el sabor empieza a ser demasiado fuerte.

Rallar la raíz de jengibre para todos los demás usos. Al rallar el jengibre se obtiene el sabor más potente, y es más fácil que utilizar un cuchillo para picar la dura y fibrosa raíz. Las cuchillas del rallador trituran la pulpa en pequeños trozos y la separan de las fibras de la raíz. Asegúrate de rallar sobre un cuenco para recoger cualquier jugo. El sabor del jengibre rallado (o picado) puede intensificarse con el tiempo, algo que hay que tener en cuenta cuando se preparan platos con antelación.

Cómo guardarlo
Para guardar la raíz de jengibre fresca, colóquela, sin pelar, en una bolsa de plástico con cierre y guárdela en la nevera durante varias semanas o en el congelador durante varios meses. El jengibre viejo con la piel arrugada se puede utilizar (aunque puede ser más fibroso), pero deseche el que haya empezado a enmohecerse. El jengibre congelado conserva su frescura recién comprada y puede utilizarse directamente del congelador, sin necesidad de descongelarlo. La raíz dura como una roca es más fácil de cortar, picar y rallar que la fresca porque las fibras permanecen firmes y no se enganchan en la hoja del cuchillo o en los agujeros del rallador.

Sustitución del jengibre fresco por jengibre molido
Sustituya 1 cucharada de jengibre fresco picado por ½ cucharadita de jengibre en polvo (también conocido como jengibre molido), o viceversa. La pasta de jengibre picado (que se vende en tarros) también puede utilizarse en lugar del jengibre fresco.

Seis formas cotidianas de cocinar con jengibre fresco
-Añada 2 ó 3 monedas de jengibre fresco a la salsa de tomate casera o a la salsa barbacoa.
-Añada 1 cucharadita de jengibre fresco picado a 1 taza de adobo o aderezo para ensaladas.
-Mezcle 1 ó 2 cucharaditas de jengibre fresco picado en su batido matutino.
-Saborice los cereales calientes con 2 ó 3 monedas o con ½ ó 1 cucharadita de jengibre fresco picado.
-Mezcle de ½ a 1 cucharadita de jengibre fresco picado en 4 tazas de macedonia o compota de frutas.
-Incorpore de 1 a 2 cucharadas de jengibre fresco picado a los ingredientes secos de los productos horneados.

¿Listo para empezar? Echa un vistazo al Planificador de Comidas de Forks, la sencilla herramienta de planificación de comidas semanales de FOK para mantenerte en un camino saludable basado en plantas.