Etapa 2: Juego solitario

El juego solitario es una de las primeras etapas de juego. Jugar solo es un paso natural en el desarrollo del comportamiento lúdico de los niños de 0 a 2 años.

Como los niños aprenden a través del juego y en esta etapa aún no han aprendido lo suficiente de las relaciones para poder jugar junto a otros.

Jugar solo da a los niños el tiempo que necesitan para pensar, explorar y crear. Cuando un niño juega solo, aprende a concentrarse, a pensar por sí mismo, a tener ideas creativas y a regular sus emociones. Todas estas cosas son importantes para que un niño aprenda. Jugar de forma independiente es importante y normal.

Los bebés y niños pequeños (desde el nacimiento hasta los dos años aproximadamente) se encuentran en esta etapa. A esta edad están muy ocupados explorando y descubriendo su nuevo mundo. Cada nuevo objeto o situación que se introduce es una nueva experiencia de aprendizaje.

Lo positivo del juego solitario

  • Los niños tienen la oportunidad de tener la libertad de usar su imaginación
  • Aprenden y practican habilidades físicas y mentales
  • El niño es capaz de involucrarse plenamente en una actividad, por lo que experimenta la «fluidez»
  • Son capaces de explorar, crear y aprender cómo funcionan las cosas
  • Les permite ser capaces de establecer sus propias reglas de juego
  • Significa que un niño no tiene que cumplir las expectativas de nadie

El juego solitario no debe utilizarse para identificar a los niños poco sociables. En ningún caso los niños están siendo «insociables» sino que están aprendiendo a través del juego.

Aunque el «juego social» («jugar juntos») se desarrolla alrededor de los 3 ó 4 años es importante señalar que el juego solitario no desaparece.

Tipos de juego solitario

  • Juego activo solitario: El juego activo solitario también incluye el juego de fantasía mientras se juega solo, o con un compañero imaginario. Es un puente entre el juego solitario y el verdadero juego social. Incluye actividades sencillas repetidas con o sin juguetes u otros objetos, por ejemplo, golpear dos bloques de madera o llenar un cubo con arena y verterla.
  • «Juego imaginativo solitario»: Esto puede fortalecer el desarrollo saludable, ya que un niño solo en su habitación utilizando una acción en una historia imaginaria muestra el pensamiento abstracto, el lenguaje y la creatividad.

El «juego solitario» (jugar solo) es seguido por el «juego del espectador» -mirar y observar a otros jugar- alrededor de los dos años de edad.

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