Los cajeros automáticos están tan integrados en la vida estadounidense que a veces resulta difícil recordar lo maravillosa que es la tecnología. El hecho de que la infraestructura global de telecomunicaciones permita la conexión en tiempo real con las cuentas bancarias de todo el mundo es suficientemente increíble, pero los cajeros automáticos también realizan funciones mecánicas notables y notablemente consistentes: primero dispensando dinero en efectivo en cantidades precisas, y ahora incluso aceptando depósitos de dinero en efectivo contado instantáneamente y cheques leídos por la máquina. Aunque la lectura automática aún no tiene una precisión del 100%, la función de recuento de efectivo en sí misma es bastante notable.
Por supuesto, ninguna tecnología es perfecta, y la mayoría de la gente se ha preguntado en algún momento, «¿qué pasaría si un cajero automático dispensara una cantidad de dinero equivocada?». De hecho, le hice esa misma pregunta a una cajera de mi cooperativa de crédito local, y me respondió que cuentan el efectivo al final de la noche y que se darían cuenta de cualquier disparidad y la corregirían. Sea cierto o no, la semana pasada tuve mi propio percance en el cajero automático, y tengo que confesar que se resolvió perfectamente, a costa de una sola llamada telefónica de 21 minutos.
Esto es lo que ocurrió.
Los cajeros automáticos del Bank of America aceptan depósitos de giros postales, pero no son geniales
A lo largo de los años he depositado cientos de miles de dólares de giros postales en los cajeros del Bank of America y nunca me he encontrado con ningún problema aunque, dependiendo del modelo de la impresora de giros postales y del modelo del cajero automático, suelo tener que introducir manualmente el importe de los giros que deposito.
Lo que nunca me había sucedido hasta el domingo pasado era que el cajero aceptara mi depósito de giros postales, fuera a una pantalla de «procesamiento» durante 2-3 minutos y luego «cancelara» la transacción sin devolver los giros postales ni reconocer la transacción de ninguna manera.
Inmediatamente comprobé mi cuenta en línea, y cuando vi que no se había registrado ninguna transacción, llegó el momento de llamar por teléfono.
Presentar una reclamación
Utilicé el botón de «contacto» dentro de la aplicación para iPhone de Bank of America, que marcó el 844-870-8569. Después de explicar la situación al representante de primera línea, me dirigieron a un departamento que creo que se llamaba «fraude», y me dieron un número de teléfono adicional, 877-366-1121. Después de explicar la situación a ese representante, me transfirieron a otro departamento, del que no me dieron el nombre. Ese representante finalmente pudo abrir una reclamación para mí. Me pidió:
- la fecha de la transacción;
- la hora aproximada de la transacción;
- el importe del depósito;
- los números de serie de los giros postales que deposité;
- el código de identificación del cajero automático, que estaba escondido sobre la pantalla del cajero y bajo la capucha del mismo (tardé uno o dos minutos en encontrarlo).
También le pregunté con qué frecuencia ocurrían este tipo de cosas, y me contestó que recibía «entre 3 y 5 llamadas al día». Naturalmente, después de tuitear la situación me llegaron noticias de varios lectores que habían experimentado idénticos problemas. Eso es lo que se consigue cuando se ejecutan varias vidas de uso ordinario de cajeros automáticos cada año!
Resolución
Como se prometió, mi cuenta fue acreditada con un «crédito temporal» el lunes 11 de septiembre (en realidad un día antes de lo prometido). El jueves 21 de septiembre, recibí un mensaje en línea en el que se informaba de que la reclamación se había resuelto y el crédito temporal se había hecho permanente. El texto completo del PDF adjunto era:
«Hemos concluido nuestra investigación de esta transacción disputada. El crédito emitido anteriormente es ahora permanente»
Supongo que recibiré una carta en papel con el mismo efecto en uno o dos días.
Conclusión
No creo que haya una epidemia de cajeros automáticos de Bank of America que funcionen mal en todo el país, así que no creo que esto sea algo de lo que debas preocuparte, y mucho menos obsesionarte. El verdadero objetivo de este post es simplemente tranquilizarte: existe un sistema para resolver las transacciones de los cajeros automáticos que funcionan mal, y funciona.
A diferencia de, por ejemplo, la reclamación del seguro de retraso de viaje de la tarjeta de crédito, no hay una receta secreta para resolver estos problemas. Sólo tienes que llamar inmediatamente, proporcionar toda la información posible, y tu reclamación se resolverá en poco tiempo (y tendrás el uso del dinero mientras tanto). Me imagino que parte de la información que proporcioné ni siquiera era necesaria para resolver la reclamación. Como llamé inmediatamente pude facilitar el código de identificación del cajero, pero si hubiera esperado a llegar a casa supongo que Bank of America podría buscarlo ellos mismos.