Aunque la mayoría de nosotros nos acordamos de limpiar nuestras ventanas regularmente, a menudo nos olvidamos de nuestras persianas. La limpieza regular las mantendrá como nuevas y funcionando; sin embargo, esta es una tarea que la mayoría de la gente prefiere evitar. El secreto está en evitar que el polvo y la suciedad se acumulen con el tiempo, creando una capa difícil de eliminar. Cuando se trata de mantener limpias las persianas de las ventanas, la prevención es la mejor herramienta, así que conviértala en parte de su limpieza semanal habitual.
Conozca sus persianas
Los fabricantes de persianas crean instrucciones por una razón, así que léalas cuidadosamente y siga los consejos de limpieza que vienen con ellas. Además, busque consejos y recomendaciones específicas, así evitará posibles problemas en el futuro. Los fabricantes ponen a prueba sus directrices y pueden darte los mejores consejos disponibles sobre el cuidado de tus persianas. Como norma, limpie sus persianas a fondo cada cuatro meses o, como mínimo, dos veces al año.
Método de limpieza ecológico de la abuela
Si su abuela es como la mía, utiliza vinagre para todo, incluso para limpiar las persianas. He aquí cómo:
- Llena un pequeño cuenco con vinagre blanco y busca un par de guantes o calcetines de algodón limpios.
- Pon tu mano dentro de uno de los guantes o calcetines y sumerge la punta del calcetín, o tus dedos, en el cuenco.
- Pasa la mano o los dedos por cada lama para eliminar el polvo y la suciedad. Es posible que tenga que enjuagar el calcetín o el guante unas cuantas veces.
- Alterne entre los dos calcetines o guantes, empapando un calcetín o guante mientras usa el otro.
Importante: Aunque este método es seguro para la mayoría de los materiales, no sature demasiado las persianas, especialmente si son de madera. El agua deforma la madera, así que exprima toda la que pueda y séquela inmediatamente. Evite que el vinagre entre en contacto con los ojos o la piel.
El material importa
Es importante saber de qué material están hechas sus persianas, y luego limpiarlas en consecuencia. Estos son algunos consejos específicos para cada material:
- Persianas de madera – El exceso de humedad es el peor enemigo de la madera, así que evite mojar las persianas de madera. Para quitarles el polvo, utilice un paño limpio y suave, un plumero o un cepillo de aspiradora. Para dar más vida a la madera, utilice un limpiador específico para madera, como el aceite de limón. Leer las directrices del fabricante es más importante que nunca con las persianas de madera, así que comprueba qué productos recomienda la empresa antes de usar nada en ellas. Pase una hoja de secadora a lo largo de cada lama para evitar que el polvo y la suciedad se peguen.
- Persianas de imitación de madera – Las persianas de imitación de madera son las más fáciles de limpiar, porque son duraderas y resisten la deformación. Puede quitarles el polvo igual que a las persianas de madera, pero también puede limpiarlas con un detergente suave y agua tibia en un paño ligeramente humedecido, secándolas después. Utilice una hoja de secadora para mantener el polvo a raya.
- Persianas de vinilo y aluminio – Quite el polvo con frecuencia y limpie las manchas con un detergente suave utilizando agua tibia y secándolas después. Incline las lamas hacia arriba y hacia abajo ligeramente para quitar el polvo de ambos lados, moviéndose a lo largo de cada lama. Evite presionar demasiado, para no doblarlas o romperlas. Si la suciedad es difícil de eliminar, retire las persianas de la ventana y sumérjalas en una bañera llena de agua tibia y jabón. Aclárelas y séquelas con un paño, o cuélguelas y déjelas abiertas para que se sequen al aire.
- Persianas verticales de tela – Quite el polvo con frecuencia con un cepillo de aspiradora para evitar que se acumule. Limpie las manchas como se indica utilizando un detergente claro para evitar que se manchen, y luego séquelas con un blog. Aunque no puede sumergirlas en agua, compruebe las recomendaciones del fabricante para ver si puede limpiarlas en seco.
La limpieza regular según las directrices del fabricante mantendrá sus persianas tan bonitas como el día en que las recibió, siempre que tenga un cuidado especial y las limpie regularmente. Al evitar la acumulación de suciedad y polvo, será fácil darles una limpieza rápida cada vez que limpie el resto de su casa.
Para obtener instrucciones de limpieza específicas para todo tipo de persianas, lea este post.
¿Busca cómo limpiar sus persianas? Echa un vistazo a este post sobre cómo hacerlo.