Blue-Beard, Blue-Spirea, Caryopteris como Dark Night o Heavenly Blue
En nuestra zona, estos arbustos son casi herbáceos, es decir, después de la mayoría de los inviernos mueren hasta el suelo. Por ello, no suelen requerir más que la eliminación de las cañas muertas a principios de la primavera, antes de que echen las hojas. Si la planta ha muerto hasta el suelo, lo mejor es un corte limpio a unos 2″ por encima de la línea del suelo. Sin embargo, hay que tener cuidado de no eliminar ningún tallo viable ni dañar los nuevos brotes.
Al fertilizar los arbustos jóvenes puede aumentar tanto el tamaño como la cantidad de flores de la planta. Se pueden utilizar fertilizantes granulares, líquidos o en forma de estacas. Los de tipo granular deben trabajarse en el suelo alrededor de la planta a razón de 2 libras o 2 pintas por 100 pies cuadrados de lecho de plantación. Una forma alternativa es perforar o hacer agujeros de 6″ de profundidad en la línea de goteo de la planta. En estos agujeros debe verterse un total de 1/4 de libra de fertilizante por cada pie de altura o extensión del arbusto (dividido y vertido uniformemente entre todos los agujeros). Estos agujeros no deben llenarse con más de 1/3 del fertilizante y luego deben rellenarse con tierra. Este método de fertilización sólo debe realizarse una vez al año, y es mejor hacerlo a finales del otoño, después de la caída de las hojas, o a principios de la primavera, antes de la brotación.
Los fertilizantes líquidos (como Miracle Gro) se mezclan con agua y se aplican del mismo modo que se riega la planta (consulte el producto para obtener detalles específicos). Esto debe hacerse tres o cuatro veces al año, empezando a finales de abril y terminando a mediados de julio. Se pueden utilizar fertilizantes de tipo estaca siguiendo las indicaciones del envase. Con cualquiera de las técnicas anteriores debe utilizarse una mezcla equilibrada, 20-20-20 o 20-30-20 o 18-24-16. Los abonos orgánicos, como el estiércol, también pueden utilizarse con buenos resultados. El material debe trabajarse en el suelo abierto a razón de una fanega por un arbusto de 6′ o 100 pies cuadrados de superficie de lecho.
Estos arbustos necesitan pocos cuidados en invierno, el primer año, sería buena idea acolcharlos para proteger los nuevos brotes de crecimiento y evitar que la planta se «salga del suelo» debido a los ciclos de congelación y descongelación. El mantillo de compost o de corteza funciona bien.