Bambi
En la primera película, Bambi no está muy personalizado para reforzar la perspectiva medioambiental de la película. Bambi, como la mayoría de sus amigos, podría ser cualquier ciervo de cualquier bosque. En su primera juventud, Bambi tiene los ojos muy abiertos, las patas enjutas, un carácter curioso y una voz aguda. A medida que crece, se vuelve gradualmente más maduro, pero incluso en la joven edad adulta, parece un ciervo muy joven con una complexión delicada y una naturaleza bastante ingenua.
La animación naturalista de la primera película se vio favorecida por un par de cervatillos de cuatro meses enviados al estudio por los guardas de caza de Maine. Sin embargo, también se utilizaron modelos humanos para una escena: la actriz Jane Randolph y la estrella de Ice Capades Donna Atwood actuaron como referencias de acción real para la escena en la que Bambi y Thumper están en el hielo. Disney también hizo que Rico LeBrun, un pintor de animales, viniera al estudio para dar una conferencia sobre la estructura y el movimiento de los animales. El fotógrafo de la naturaleza Maurice Day pasó meses en un bosque de Maine, grabando animales para los animadores, también.
Bambi II
En Bambi II, Bambi está mucho más claramente personalizado. En esta película, que rellena el hueco entre la muerte de su madre y la siguiente vez que se le muestra como joven adulto, Bambi se enfrenta a una serie de retos. En primer lugar, la muerte de su madre y su consiguiente traslado a vivir con su padre, el Gran Príncipe del Bosque. Su padre se resiste a aprender a ser padre. Además, Bambi comienza a enamorarse de Faline, y entra en conflicto con un cervatillo mayor llamado Ronno (el mismo ciervo con el que más tarde se pelearía por Faline de joven). Mientras que en la primera película sigue la vida dondequiera que le lleve, en esta película se muestra más firme para vincularse con su padre e impresionarlo. En la primera película, el estatus de Bambi como joven príncipe tenía poco impacto en el flujo de la historia. En esta película, su rango se convierte en una parte clave del argumento, ya que se propone demostrarse a sí mismo y a los demás, sobre todo a su padre, que merece ser príncipe y que puede hacer honor al nombre de su padre.