La mayoría de la gente se acuerda de cuidar su césped en otoño con el rastrillado, la aireación, la paja y la sobre-siembra. Desgraciadamente, no son tantos los que piensan en fertilizar sus árboles y arbustos en otoño. Mucha gente lo considera parte de su lista de «cosas por hacer» en primavera. Pero veamos por qué la aplicación de fertilizante para árboles en otoño es una inversión inteligente.
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¿Por qué aplicar fertilizante para árboles en otoño?
Entonces, ¿por qué pensar en fertilizar árboles y arbustos en otoño? ¿Te has equivocado durante años? No exactamente, porque los jardineros y los expertos han recomendado tradicionalmente abonar las plantas leñosas a principios de la primavera, antes de que comenzaran su crecimiento activo. Entonces, ¿qué ha cambiado?
En primer lugar, no hay nada malo en la sabiduría convencional, es sólo que las nuevas investigaciones indican que en realidad hay un mejor momento para hacerlo.
Adivinó. Otoño.
El otoño es el momento en que muchos expertos recomiendan fertilizar sus árboles y arbustos, concretamente a finales de otoño, un mes después de la primera helada mortal. Las investigaciones han demostrado que el crecimiento a principios de la primavera depende casi por completo de los nutrientes absorbidos y almacenados el año anterior. Esto se debe a que las plantas leñosas hacen un uso más eficiente de los nutrientes mientras sus raíces siguen creciendo pero el crecimiento de los brotes ha terminado por la temporada. Las raíces absorben los nutrientes y los aplican al desarrollo de las raíces y a la resistencia a las enfermedades. Los nutrientes almacenados están inmediatamente disponibles y listos para ser utilizados por el nuevo crecimiento en la primavera.
Utilice el fertilizante para árboles adecuado
Si está tratando de evitar la contratación de un arbolista y quiere encargarse usted mismo de la fertilización de los árboles, investigue. Siempre es una buena idea conseguir un kit de análisis del suelo en la oficina de extensión de su condado. Esto te ayudará a averiguar qué nutrientes faltan en tu suelo para que puedas adaptar el abono a las necesidades reales de tus plantas. Es fundamental no fertilizar en exceso ni clavar puntas al azar en las raíces de los árboles en un esfuerzo general por fertilizarlos. Puede matar un árbol por aplicar demasiado fertilizante o causar enfermedades como la clorosis.
Además de dañar los árboles sanos con el exceso de fertilización, puede dañar el medio ambiente. Demasiada fertilización crea un potencial de contaminación por escorrentía y contaminación in situ. Si no está seguro de la cantidad de fertilizante que debe utilizar, de la mezcla que debe emplear o del momento más adecuado para fertilizar sus árboles en función de las condiciones del suelo, póngase en contacto con un profesional.